Un estudio demuestra la relación existente entre felicidad y productividad

Noticia


Cuanto mayor es la confianza de los empleados en sus jefes más felices y motivados se sienten, lo que implica un aumento de la productividad. Esta sencilla ecuación ha quedado refrendada por un reciente estudio de la consultora Towers Watson.

El estudio en cuestión se titula  2014 Global Workforce Study, y para su elaboración se han realizado nada menos que 32.000 encuestas a empleados de una treintena de países. La respuestas no dejan lugar a las dudas: un 72% de las personas se muestra comprometidas con su trabajo si considera que su superior cumple su función de manera eficaz.. Un mayor compromiso significa más motivación y, en definitiva, un equipo suficientemente motivado es la mejor garantía de un trabajo bien hecho y de la máxima productividad.

¿Por qué se tiene una mala percepción de los jefes?

empleados motivadosEn la mayoría de ocasiones los despachos directivos están ocupados por profesionales capacitados, capaces y muy buenos técnicamente. Sin embargo, muchas veces no saben cómo gestionar equipos humanos y, sobre todo, adolecen de importantes déficits de comunicación: tienen claro qué es lo que hay que hacer pero no saben como comunicarlo.

Según otro informe reciente sobre la relación entre los empleados y sus jefes, el Employer Branding de Randstad, realizado entre más de 8.000 encuestados de entre 18 y 65 años de edad, el valor que los asalariados más aprecian de su superior es la honestidad, aspecto señalado como el principal por el 24% de los trabajadores, seguido de la fiabilidad (13%) y la sinceridad (12%). Por el contrario, tan solo un 1% de los encuestados señalaron que la cualidad que más preferían en su jefe es que fuese “poderoso”.

«A la Escuela Europea de Coaching nos llegan empresas alarmadas porque al realizar encuestas de clima laboral descubren que algo falla: que hay descontento entre la plantilla. Entonces es el momento de sentarse con el líder y trabajar una serie de aspectos que hagan de él un buen gestor de personas», declara Eva López-Acevedo, la directora de la escuela.

Para López-Acevedo, una de las mejores especialistas en coaching de España, es necesario «acabar con el típico jefe atrincherado en su despacho». La clave de la motivación está en involucrar a los trabajadores y para ello hay que pedirles ayuda siempre que sea necesario. «Conozco casos de líderes de la vieja escuela que no saben hablar inglés y en lugar de pedir ayuda a su equipo, ponen excusas para no asistir a una reunión o perderse una videoconferencia». Esta actitud no es aceptable hoy en día y los jefes deben asimilar que «la vulnerabilidad no es algo malo».

El perfil ideal de un líder con el que sus empleados se van a sentir felices y motivados es  aquel que reconoce sus errores, busca el trabajo en equipo y se abre a nuevas ideas y propuestas, tratando de sumar habilidades y competencias en busca del bien común.

En ocasiones, el problema de un equipo escasamente motivado no proviene del jefe, también hay empleados «tóxicos» que no se involucran ni aceptan las reglas y de grupo, manteniéndose al margen y influyendo negativamente en el estado anímico y en las dinámicas de trabajo en equipo.

Post relacionados: