Trucos para optimizar la productividad personal en una semana

Gestión empresarial


Cada vez son más los que tenemos proyectos en mente con los que queremos llegar a la cúspide. Pero para ello necesitamos tener una buena organización de base. Y no basta con planificarse un único día… sino que hay que hacerlo todos los días de la semana. Si no sabes cómo, aquí te dejamos unos trucos.

 5 claves para una buena planificación semanal

      1. Antes que nada,tranquilízate: no te agobies. Hay gente que con sólo pensar en todo lo que tiene que hacer se asfixia, y pierde el tiempo tontamente pensando en lo que tiene que hacer y en que no tiene tiempo para ello… ¡No! ¡Para! Así sí que malgastas tus horas de oro. Contra más tardes en pensar que tienes muchas cosas que hacer, más tardarás en ponerte a hacerlas. Un consejo: cuando esto te pase, detente a ti mismo de la forma que te sea más efectiva y dite “¡basta! ¡empecemos!”. De verdad, a veces esto es fabuloso. A la que arrancas verás que todo es más fácil, y que incluso te sale solo, del tirón.
      2. La semana es larga, y como todas las buenas jugadas, hay que planearlas de antemano. Tú eliges si organizarte la semana la víspera del domingo, o el lunes por la mañana (eso sí, levántate pronto). Para tantos días es aconsejable tener a mano una agenda como las de los ejecutivos, una de esas que tienen los días desglosados en horas (o prácticamente en minutos). ¿Las reconoces? Pues sí, a esas nos referimos. Son de lo más prácticas cuando tienes que ponerte a hacer mil cosas con el tiempo justo sólo para 100. Organízate bien. ¿Qué tiene prioridad? ¿Qué tienes que hacer sí o sí tal día? Apúntalo todo, y juega a ver en qué día y a qué hora te cuadran mejor todos tus quehaceres.
      3. Y llegados a este punto puede que te encuentres con un problema… ¿Qué pasa si tienes que seguir añadiendo obligaciones, y no tienes más horas? No pasa nada, tranquilo. Tranquilidad ante todo. Puede (porque a veces ocurre) que no tengas más remedio que descartar o posponer citas, reuniones y tareas. Algunas de estas pueden solucionarse de una forma más fácil y rápida. Por ejemplo, algunas de estas reuniones o citas, en vez de resolverse de forma física (lo que conllevaría más tiempo, entre el desplazamiento y la cordialidad obligada al estar cara a cara), pueden llevarse a cabo con una simple llamada, un email o, en el peor de los casos, una videoconferencia mediante skype u otro medio. Así ahorrarás tiempo e irás más al grano.
      4. Ante todo, brevedad. Todo aquello que te lleve una hora, intenta hacerlo en media. Sé breve pero conciso en general. Andarte por las ramas en una conversación o en la realización de un trabajo puede ser una buena forma de engrosar tanto una relación como un proyecto. Pero, como dice el dicho: “lo breve, si bueno, dos veces bueno”. A veces ser directos es la mejor opción para todos, porque además ¿quién dice que la otra persona no vaya también muy atareada? Lo mejor es no perder el tiempo, ni hacerlo perder a nadie.

      trabajo en equipo ventajas

      Estos son algunos de nuestros consejos. No obstante, hay quienes tienen otros métodos muy distintos para organizarse o para llegar a tiempo con todo, pues cada uno es un mundo y cada situación, distinta. Lo que sí es innegable es que el triunfo no se puede dejar a la suerte… sino que se tiene que trabajar.

       

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